Nuestra historia comenzó en el 2019, cuando, en un viaje de exploración buscando opciones naturales a los sorbetes de plástico, escuchamos a un niño, hijo de un agricultor, decir mientras jugaba: «Traigan la pajita». Curiosas nos dimos con la sorpresa que se referían a una planta nativa, propia de la sierra y del Valle del Mantaro. Al investigar y testear la planta en el proceso de transformación, descubrimos que, después de un proceso de gestión de cultivo, la planta calificaba para ser procesada y finalmente llegar a ser un sorbete natural. Asimismo, por crecer a más de 3000 m.s.n.m., zona geográfica hostil y con muchas dificultades de acceso, llegamos a comunidades de agricultores que han víctimas de esas dificultades, siendo vulnerados por la pobreza económica, muchas veces extrema, por el poco acceso a salud y educación de calidad y por no tener opciones de desarrollo laboral, económico y personal. Desde ese momento, comenzaron nuestras acciones como empresa socio-ambiental.
Misión
Generar una cultura de consumo sostenible y responsable con el medio ambiente, representando oportunidades de desarrollo para la sociedad.
Visión
Reemplazar al sorbete de plástico por sorbetes 100% naturales, promoviendo el compromiso social y ambiental.